Prison University Project (PUP) está localizada en una de las prisiones más notorias en el mundo: La Prisión de San Quentin en California. PUP incluye un selecto grupo de profesores, tutores, y voluntarios de varias universidades prestigiosas como U.C. Berkeley, Stanford, San Francisco State, San Jose State, y varias otras universidades locales y de alrededor del mundo.
Estos participantes son una parte esencial en la educación y rehabilitación de los hombres encarcelados en San Quentin.
Dos de esos profesores voluntarios son Paco Brito y Laura Wagner. Ellos son major conocidos por los estudiantes por su primer nombre en lugar de su apellido.
Paco y Laura comparten una historia interesante. Ellos se conocieron por primera vez en una protesta por el alza de pago en colegiaturas en la Universidad de Berkeley y desarrollaron una conexión personal.
Los dos comparten la misma idea de que todas las personas deberían tener la oportunidad de tener una educación.
“Empezamos a organizar eventos juntos en la universidad,” Paco explicó en una reciente entrevista. Laura agregó que su intención era hacer cambios en la cultura de los estudiantes.
“Comencé a ser voluntario de PUP en el 2012 porque recordé cuando la educación era una prioridad en California”, dijo Paco. “Después de la noche al mañana cambio a la construcción de prisiones”.
Laura se enteró de PUP por una amiga. “me hice voluntaria para enseñar un curso de inglés”, dijo ella. Laura enseño varios cursos de inglés y, en una ocasión, compartió las aulas con Paco enseñando una clase de investigación avanzada. Laura dijo, “Cuando empecé a relacionarme con mis estudiantes, mi perspectiva cambio porque fui capaz de ver su humanidad”.
“Ms. Wagner es una per- sona especial”. Dijo Steve Brooks, un preso quien tomó clases con Laura. “ella es at- enta, cordial, y siempre ani- ma a sus estudiantes”.
“Como profesora es excepcional”, dijo Brooks, “Ella es muy consciente y todo el tiempo trata de que los estudiantes se envuelvan en las conversaciones en clase. Y cuando estos no quieren participar les da un pequeño empujón (figurativamente hablando) para que sientan más confianza”.
Paco enseño inglés y español, él dice, “Me sorprendí cuando los estudiantes retaban y cuestionaban todo”, dice Brito, “Me gustó el intercambio de ideas entre los estudiantes y profesores”.
“Paco es un profesor excelente”, dijo Carlos Salmón quien enseño un curso de español con él. “Su forma de enseñar es fácil y eficiente”.
Richard Richarson un estudiante de PUP quien tomo clases de español con Paco, dice Paco hizo el aprender español muy fácil aun para las personas como yo que no teníamos idea de cómo escribir español y mucho menos lo hablábamos. “Nos enseñó a conjugar los verbos en una forma fácil de entender”.
Richarson dijo, “Paco es una persona muy buena, atenta y es muy difícil no llevarse bien con él. Y lo que siempre me llamó la atención es que siempre está contento”.
Paco y Laura están de acuerdo en que los estudiantes encarcelados de colegio son diferentes a los estudiantes de colegio tradicionales. “estos tienen la disposición de cuestionar el proyecto y se envuelven en este,” dijo Laura. “Yo encontré formas diferentes para enseñar mi material y para que fuera más relevante”.
La pareja recientemente se movió para el sur de California en donde Laura consiguió un trabajo en un colegio comunitario. Laura dijo, “estoy muy emocionada de comenzar mi carrera oficial como catedrática”.