
La importancia de crear y mantener una buena comunicación constante en que puede ayudar a fortalecer la conexión que una persona encarcelada tiene con sus hijos y familiares.
De acuerdo al Centro Nacional de Recursos para Hijos y Familias de personas encarceladas de la Universidad Rutgers Camden, los niños que tienen uno o ambos padres encarcelados enfrentan grandes dificultades, por ejemplo de cómo hacer preguntas acerca de sus padres y causar tensión con sus cuidadores al no tener una respuesta apropiada.
La Biblioteca sobre Hijos de Padres Encarcelados (CIPL, por sus siglas en inglés) presenta recomendaciones para establecer y mantener una buena relación entre los padres y sus hijos.
Aun cuando la comunicación sea limitada por parte de la institución, la disposición del padre o madre para escuchar las inquietudes de los niños es fundamental para ayudar a los hijos a tener más confianza y sentirse apoyado. Por ejemplo:
Escribir cartas
Según la Biblioteca sobre Hijos de Padres Encarcelados, las cartas son un medio de comunicación a través del cual padres e hijos pueden compartir sus sentimientos sin ser juzgados.
Una carta también es un objeto que los niños podrían atesorar y puede servir como un modo de consuelo y motivación. Pero en algunos casos, cuando los niños encuentran dificultades para escribir una carta, los cuidadores podrían ayudar a que los hijos sigan en contacto con su padre o madre encarcelada de otra manera.
Conversar por teléfono
Comunicarse por teléfono ayuda a que un padre o madre escuche atentamente a sus hijos. Aunque el tiempo autorizado para llamar sea corto, se recomienda al padre poner atención y hacer preguntas acerca de la vida de sus hijos.
La Biblioteca sobre Hijos de Padres Encarcelados hace las siguientes recomendaciones para los cuidadores:
Ayudar al niño o niña si no puede escribir una carta, tal vez pueda hacer un dibujo.
Hablar con los niños a menudo sobre cosas que desearían poder contar a su padre o madre encarcelada.
Hacer una lista de cosas que pueden incluir en la carta.
Describir lo sucedido en caso de haber tenido un viaje o haber celebrado ocasiones especiales.
Preparar una caja de tesoros con pequeños proyectos, diplomas escolares y fotos familiares, entre otras cosas, para regalar al padre o madre cuando salga de la cárcel.
La Biblioteca sobre Hijos de Padres Encarcelados también tiene estas recomendaciones para los padres encarcelados: Crea un calendario de fechas y recordatorios.
Anota las ideas y preguntas que tengas para crear pláticas y entewnder las inquietudes de los niños.
Pide consejos a tus familiares para conocer más de los intereses del menor.
Al recibir dibujos o cartas, no critiques el dibujo o la gramática y no esperes cartas largas.
Explica tus actividades diarias para ayudar a tu hijo o hija a entender tu vida diaria. Haz preguntas de la vida diaria, de las actividades y amistades del niño o niña. Crea un ambiente saludable y de respeto.
Hijos adolescentes
La Biblioteca sobre Hijos de Padres Encarcelados dice que conforme los niños van creciendo, es importante que sepan que sus padres siempre piensan en ellos.
Sin embargo, para los padres encarcelados, la comunicación podría dificultarse cuando los hijos son preadolescentes y adolescentes. Los jóvenes no comentan mucho por teléfono o en la hora de la visita. Esta situación puede crear en la persona encarcelada un sentido de rechazo por parte del adolescente.
Estas son algunas recomendaciones para crear una conexión con los hijos adolescentes:
No tengas miedo de hacer preguntas de la vida del adolescente.
Busca temas en común como música, televisión o deportes.
Recuerda que algunos adolescentes no les gusta hablar mucho de sus cosas personales.
No tomes nada personal en el comportamiento del adolescente.
No utilices el tiempo del teléfono o de la visita para reprender.
La publicación recomienda a los padres encarcelados a no enfocarse en sus propios errores con la ley, tampoco crear fantasías o promesas que sean difíciles de cumplir. Y agrega, que es recomendable que el encarcelado mantenga presente la realidad de la situación.
El ambiente en la prisión puede ser difícil para mantener una buena comunicación por diversos factores como restricciones de la institución o que el padre o madre encarcelado se encuentre lejos para visitarlo.
Pero de acuerdo a estos consejos se puede crear una sana relación entre los encarcelados y sus hijos.