La administración estatal, los oficiales y los residentes de la prisión conmemoraron las vidas de los recientes fallecidos por el suicidio en una vigila única dentro de San Quentin este octubre pasado.
Durante la sesión, se apreció el interés en común de buscar la comprensión sobre el suicidio. El ambiente era de pesar, tanto como de ánimo.
Con las palabras, “es una pena que la tragedia nos une de esta manera”, dichas por la Dra. Rachel Chen, encargada de salud mental, se dio inicio. “Esta vigilia les da, tanto a los trabajadores como los encarcelados, la oportunidad para sanar juntos y crecer juntos”.
“Muchos de nosotros no tenemos el tiempo, ni el espacio para verdaderamente llorar por nuestros muertos”, añadió ella.
El maestro de ceremonia, Ned Buskirk, director del programa “Vivos Adentro” (Alive Inside, en inglés) compartió como tratando con la muerte puede ser muy difícil, especialmente cuando es a causa del suicidio.
Al terminar su pequeña introducción, se le dio la oportunidad a todos que desearan compartir su dolor o su experiencia, sobre como navegaron con el dolor por la pérdida de un ser querido.
Ayuda para sobrellevar la muerte
El Dr. Paul Burton, director de psiquiatría, compartió que no solo la muerte es una realidad, “el tratamiento mental es real también. Requiere verdadera fuerza para alcanzar solicitar ayuda. Sufrimos la perdida de dos vidas, para celebrar los vivos que aun estan aquí”.
El capellán católico, Padre Williams, compartió unas palabras de consuelo que incluyó una cita del Apóstol Pablo en el primer libro de Corintios 15 – el misterio de la transformación del cuerpo, al momento de la muerte.
También se tocó una canción especial, “Tomado por las mareas” (Taken by the tides, en inglés). La melodía facilitó a todos tomar el sentido correcto y permitió a la audiencia participar.
Durante la música, el rabino se sentó junto con el sacerdote. Estos dos colegas compartieron del evento, porque la muerte impacta ambas fes. Fue una bonita escena acompañada de bonita música.
Residentes de SQ ofrecen esperanza y ayuda
La banda “Esperanza” tomó el escenario para entonar el bello himno, “Cuan Grande es Él”. Según el líder
del grupo, Gerry Muratalla, querían resaltar el gozo en vez de la tristeza con su canto. El himno hablaba del gozo que la persona siente al acercarse a Dios, con la esperanza que el alma que partió lo verá, sin sufrir ya más. Patrick Hayes, de “Guardianes de la Luz” (Light Keepers, en inglés) compartió, “[El] estar aquí me ayuda a sobrepasar el dolor”. Hayes aseguró que, “si ustedes nos hablan, todo lo que nos digan, será confidencial”. Él dice que el grupo de Guardianes de la Luz existe para poner paro a todo suicidio, violencia, y sobredosis en SQ.
Se recuerda a Hugo Cruz
Pablo Salinas, que también es de los Guardianes de la Luz, habló en memoria de Hugo Cruz; recordando los tiempos de calidad que pasaron juntos.
“Lo veía en la yarda, jugando futbol; ahora ya no lo veo más”, recordó él. “Esto es real…estoy más involucrado con mi comunidad, no solo la hispana, sino toda”.
Cornel Allen Jr. compartió un bello poema sobre el significado del nombre “Tierra”, detallando cada letra con una palabra con mucho significado para la vida. Pablo Sánchez, pasó al frente para entonar un canto en alabanza. El canto “Inmolado y Desechado” habló del sufrimiento de Cristo por toda la humanidad, y nos recordó que todos hemos sufrido y padecido en el caminar de la vida.
Albert Campos, residente de SQ con problemas auditivos habló por medio de su intérprete de su amigo con problemas auditivos, que se tomó la vida. “En la comunidad de personas con problemas auditivos, es muy común sentirse aislado y marginalizado”, él nos compartió.
Los veteranos subieron para recordar a uno de los suyos
El residente y veterano, Noah Winchester, habló de lo difícil que fue saber del pasar del veterano Michael Antrobus y de lo frustrado que se sintió con la administración, al ver el trato de un miembro de las fuerzas armadas, que no se le otorgo una última muestra de dignidad y respeto.
Él tomó la oportunidad para informarnos de la cantidad de veteranos que se toman la vida diariamente – 22 veteranos cometen suicidio por día. El suicidio es especialmente difícil para los veteranos.
El veterano residente, Jim Snider, hizo un recordatorio de Jesse Hernández, que falleció hace ocho años. Dice él que habían señas que intentaría suicidarse regaló todas sus pertenencias.
“Que su memoria viva en nosotros, mostrando aprecio y respeto los unos por los otros”, dijo Snider. “Hablen menos, escuchen más”.
Más comprensión sobre el suicido
Este evento único concluyó con música instrumental, durante la cual se nos permitió decir, a voz alta, los nombres de personas amadas que hemos perdido.
Este tipo de reuniones hacían mucha falta y se agradece a la administración de salud mental, por hacer este programa disponible.
El siguiente evento de este tipo, está programado para el día 21 de noviembre, en la capilla A.