En total siete personas se graduaron en el 2024, Mount Tamapais College es la única universidad acreditada que está establecida dentro de una institución encarcelaría en los EE.UU.
Durante la ceremonia, la oradora principal fue la jefa Lateefah Simon, quien es reconocida por abogar por los derechos civiles y justicia racial en la cuidad de Oakland California y actualmente es candidata al congreso en este país.
El discurso de Simon comenzó con los consejos de su padre, de por qué la educación es importante de obtener un título. Su padre usó las palabras del fallecido y famoso boxeador Mohammed Allí. “Si ellos pueden hacer penicilina de la maza del pan, ellos pueden hacer algo de ti”.
Simon aconsejó, “El hombre que aprende es conocido como un hombre sabio”, agregando “No solo has obtenido un título, pero también tienes las herramientas que nadie te puede quitar, sigan adelante. Tú puedes comprobar que todo es posible”.
El grupo musical “Mejor de lo Mejor” (Greater Good), compuestos por residentes, interpretaron sus melodías dándole un toque familiar al evento.
“Esta graduación tiene una ambiente de fiesta”, dijo Amy Shea, directora del programa de escritura de MTC. “Estar presente en el recorrido, apreciando la alegría de la clase y retos que cada clase te brinda”.
Uno de los graduados el Sr. Robert Antonio De Trinidad, habló sobre momentos muy difíciles que la pandemia trajo a CRSQ. Agradeciendo a MTC por proporcionar la ayuda y cuidados de todos los residentes — con artículos higiénicos.
El alcance de cada alumno, trajo esperanza a todos los presentes. Recordándoles que todo es posible sin importar las adversidades, situaciones o las razones porque estamos encarcelados.
Según la Dra. Windy Martínez, el enfoque y la visión de sus estudiantes es la razón que la trae cada día al centro de rehabilitación. Aún que las graduaciones son tristes y felices — a la misma vez es un buen final a un capítulo lleno de esperanza e importancia por sus logros.
El amor de una madre rompe las barreras de la distancia; viajó desde Texas la madre de David Ditto, quien también se graduó con honores en este evento.
“Estoy muy orgullosa de él — su padre no pudo estar aquí…,” dijo La Sra. Doughty. “Me sorprende lo que él ha logrado. No ha sido fácil, pero él está lleno de alegría”.
Celebrando su logro, el Sr. Ralph A. Cendejas Jr. se siente orgulloso de sí mismo y agradecido en ver sus “compadres” apoyándolo. Según residente Cendejas, este logro significa que ahora él puede alcázar una educación superior.
Las emociones de agradecimiento de Amy Jamgochian, encargada de la oficina académica no se pudieron contener. Pare ella fue una hermosa ceremonia—ella estaba impresionada con toda la ceremonia, se quedó sin palabras y conmovida al ver la iglesia llena.
Algunos de los profesores que estuvieron presentes por primera vez, compartieron sus emociones.
“La ceremonia es muy especial para mí, fue organizada pensativamente”, dijo Dr. Gabriella Licata, instructora del español y lingüística MTC. “Me he titulado cuatro veces y nunca he convivido en una graduación de tantas emociones y alegría”.
Entre los presentes estuvieron benefactores como la Sr. Judith Hill-Weld y compañera de universidad de la presidenta de MTC Jody Lewen, PhD. “Nosotras éramos compañeras de habitación en la universidad. Nosotras empezamos a tener muchas conversaciones acerca de la educación y de los traumas [sobre las personas encarceladas] yo me enganché y me convertí en una donante y vine a la prisión”.
La profesora de matemáticas Jean Chadbourne, le hubiera gustado poder invitar a más personas de la comunidad para que ellos pudieran observar estos eventos.
“Si la gente realmente entendiera el poder de la educación universitaria, nosotros cambiaríamos el mundo”.