Se encuentra en la Biblia una historia navideña tradicional algo rara, de magos que vienen del oriente a adorar al niño Jesús.
Separado de las figuras que adornan el pesebre navideño, no se sabe mucho de este evento histórico.
A menos de que vivas en México, Cuba, Puerto Rico, o España y otros países Latino Americanos el “Día de Los Tres Reyes Magos” es un día de festivo muy significante. Aquí en el EE UU, se conoce como el doceavo día de la Epifanía (el día de la adoración de los reyes)
En la mayor parte de Latino América el Día de Los Reyes se celebra con los niños recibiendo regalos de los reyes magos. Esta tradición tiene mayor significado que aun Santa Claus. En la noche del 5 de enero, los niños dejan sus zapatos afuera de la puerta con un vaso de agua con pasto para los camellos y dulces o postre para los magos. El día siguiente, los niños despierten para ver que les dejaron los tres reyes magos.
Para que no se nos olvide de que se trata la Navidad, escenas de pesebres navideños se exponen en lugares públicos. Alrededor de Latino América y el EE UU, la gente Latina celebra con desfiles grandes y celebraciones del Día de Los Reyes. Aún el parque de Disneylandia tiene un desfile para conmemorar el día.
También hay un postre tradicional en la forma de una corona que se llama “La Rosca De Reyes.” Cocido dentro del pastel esta un monito que representa el niño Jesús. La persona que se encuentra el monito es obligado a hospedar una fiesta donde hace o compra tamales, para el día de la candelaria el 2 de febrero.
La mayoría de nosotros conocemos la historia del nacimiento de Jesucristo. Pero se nos cuenta en el capítulo 2 de San Mateo de que reyes magos del oriente, probablemente de Babilonia del imperio Pérsico (hoy día es Irán) vinieron a buscar a Jesús. De seguro estos hombres eran astrólogos, los científicos, eruditos, sacerdotes y consejeros al rey.
Aunque la Biblia no los nombra ni dice cuántos fueron, la iglesia primitiva les asigna los nombres de Gaspar, Melchor, y Baltazar. Conforme al Comentario de la Biblia de Matthew Henry, pudiera haber hasta catorce Hombres.
Otro aspecto es la señal en los cielos de la estrella. Siendo que eran astrólogos estos sabios interpretaron esta estrella extraordinaria como una señal especial.
Tal como se vio un pilar de fuego que guiaba a los Israelitas que salieron de Egipto hacia la tierra prometida; esta estrella (ya sea un cometa o un bólido) que los dirigido hacia Jerusalén. La Biblia nos dice que Dios habla por medio de señales, prodigios y obras maravillosas.
Aun hoy Dios nos habla por medio de un amigo, un canto o un susurro … Tácito, un historiador Romano escribe de una profecía antigua de que es probable que estos hombres sabios hayan de haber oído hablar de un gran príncipe que habría de nacer. Por supuesto la Biblia habla del Mesías venidero. De igual manera, estos sabios estaban en una misión para encontrar “el rey de los judíos, que ha nacido” (Mateo 2:2). Qué declaración tan asombrosa, al dirigirse al Rey Herodes, el Grande. Esto preocupo al rey y a toda Jerusalén; siendo que ellos estaban bajo el gobierno Romano. Lo cual causo un holocausto masivo de niños menores de dos años.
La visita de estos reyes magos confirma un interés internacional de líderes de otras religiones, de que Jesús era el prometido Mesías (confirma el Comentario Bíblico de Holman). Jim Warner Wallace, el detective de casos-fríos en América escribe en su libro Person Of Interest. “Jesús le importa a los creyentes religiosos alrededor del mundo, aunque rechazan el mensaje del cristianismo”.
Los regalos que trajeron los reyes magos eran muy significantes, dignos de un tributo a un rey. El oro simbolizaba realeza; incienso era usado por los sacerdotes en el templo; Mirra, era un aceite para unción y era un ungüento para embalsamar muertos.
Dios siempre busca adoradores verdaderos que reconozcan a Jesucristo como rey. San Juan 4:23 dice, “Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adoraran al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren.”
Me recuerdo de un canto Navideño, “El Niño del tambor.” Solo tenía su tambor y lo tocaba — Pa rum-pa, pa-pum … Que le puedes ofrecer a Jesús esta Navidad: tu talento, tu tiempo, tu tesoro?
El Rey David, el mejor adorador de todo tiempo, lo dice muy bien — “Alégrese el corazón de los que buscan a Jehová” (Salmos 105:3).
Matthew Henry hace un análisis de los riesgos que tomaron los reyes magos — Aquel que verdaderamente quiere conocer a Cristo y encontrarlo, no le va a importar el dolor ni los peligros al buscarlo. Disfruta el DÍA DE LOS REYES MAGOS aun si solo puedes tamborilear.
Cuáles son tus recuerdos de este día de festivo?