El Departamento de Corrección y Rehabilitación de California, reconoció la urgencia de informar a su organización acerca de la salud mental de los oficiales correccionales.
Según, uno de los pilares del Modelo de Californiano, informó de las necesidades ‘de cómo ser una organización informada sobre el trauma’, por Don Chaddock editor de Inside CDCR.
“La información del trauma significa el reconocer la influencia del trauma en el mundo y de buscar maneras para actuar”, dijo la Dra. Briana Rojas, psicóloga principal de CDCR y directora asociada de La Oficina de Bienestar del Empleados (The Office of Employee Wellness).
Rojas añadió, “Para hacer nuestro parte en crear un mundo que no cause más daño, significa estar consciente de las consecuencias de los traumas personales y de la sociedad”.
De acuerdo a los patrones causantes del trauma, es la decisión de la administración de hacer un cambio de mentalidad y acción para los empleados y residentes en una institución carcelaria.
La Jefa Ejecutiva Médica de San Quentin, Dra. Alison Pachynski, explicó los pasos progresivos de CRSQ y CDCR para facilitar oportunidades en combatir el trastorno post-estrés traumático por los oficiales correccionales.
Pachynski dijo, “CDCR tiene una aplicación móvil que proporciona un ‘botón de ayuda’ y un kit de bienestar disponible para sus oficiales y sus familiares”.
Estos recursos y entrenamientos de la administración han desarrollado un cambio positivo en el trato entre los oficiales y los residentes. Pachynski, habló de una experiencia cuando un oficial de CRSQ prestó atención a un residente y expresó su preocupación por el.
“Este tipo de cuidado y cambio de cultura dentro de SQ y de sus oficiales es el espíritu y comunidad — que hace este lugar un centro de la rehabilitación”, expresó Pachynski.
Basado en el artículo de El Guardián (The Guardian), añade la importancia de estos efectos de trauma. En una entrevista con el oficial Michael Van Patten, explico que el 95% de las asignaciones de los oficiales son rutinarias y aburridas.
Van Patten agregó, que la mayor parte de sus asignaciones consiste en; contar a los reos a las horas asignadas, el monitoreo constante y a veces proporcionar papel sanitario.
Sin embargo el artículo informó, que dentro de las prisiones el otro 5% de las asignaciones, consiste de violencia que causa un estado continuo de hipervigilancia, un síntoma de PTSD que no acaba cuando termina su turno de trabajo.
Debido a la cultura de prisión, un dicho común de los oficiales es “Los guardados [encarcelados] nunca pueden parecer débil,” mencionó El Guardián
En un estudio del 2011 por Caterina Spinaris, los oficiales tienen una proporción más de PTSD que los veteranos del ejército.
Según el estudio los efectos son causados, cuando se ven superados en número contra los reos, creando un sentido de vergüenza de sus obligaciones en el empleo y no encuentran una salida saludable para lidiar la tensión de su trabajo.
Todo esto de acuerdo al reporte, son síntomas de las causas del trauma. Estos efectos pueden estar manifestándose y escalar. Los síntomas extremos pueden causar: malos recuerdos, pesadillas, hipersensible de sus entornos, pensamientos destructivos, depresión y pensamientos suicidas entre otros.
El entrenamiento administrativo de CDCR, ayuda a ver la perspectiva en el trabajo y vida de sus empleados.
El Teniente Mike Santoya comentó, “Estos cursos nos ayudan entender a nuestros hermanos y hermanas en todo el departamento al mantener los pensamientos que ‘nada nos molesta’. La mentalidad de ‘es lo que es’, es algo que tengo y estoy quitándome lentamente”.